lunes, 19 de diciembre de 2011

Cada uno es dueño de su mundo, de sus ganas de vivir.

Porque si te pones a pensarlo te das cuenta de que nada vale tanto la pena como uno mismo, que no es necesario caerse, tropezarse y ver a aquella persona que hace que se te suban las mariposas a la garganta, apra ser feliz. Porque la verdad aquellos complejos que cada persona tiene, son los que la ayudan a sacar provecho de sus cualidades y los que tendra hasta que llegue el día de su último adiós. Porque al dar media vuelta ves las cosas que has dejado atrás y vas a ir olvidando poco a poco. Porque el orgullo y el ego son cualidades hasta cierto punto que, entonces, son defectos, defectos que ayudan a ser fuerte y a darse cuenta de que vale, vale mucho. Porque los pensamientos-sueños-deseos que se tienen simplemente son eso "pensamientos"-"sueños" y "deseos". Porque siempre hay una persona que es capaz de abrirte los ojos, aunque te cueste admitir tus errores y te ayuda a despejar el color oscuro por un color claro. Porque nada, realmente, no existe nada que importe más que tú mismo, que pase lo pase siempre te vas a tener a ti para hablar, llorar o reir. Porque si te das cuenta, hay un millón de seres a tu alrededor dispuestos a estar contigo, talvez no seas capaz de verlos, pero con un poco de fe; cierra los ojos y al abrirlos serás capaz de ver un mundo totalmente distinto e increible que jamas podrías haber imagiando.

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