¿Sabes? No te pienso dar tanta importancia como para odiarte, pero te escribo ésto para que sepas lo mucho que has 'cambiado'. Aunque puede que no sea eso, y es que cuando todo ocurrió to no te conocía. Ya empiezo a darme cuenta de todo, y de lo poco que te he importado aunque tú lo has fingido. ¿Y bien? Lo que me queda es rabia. Rabia por creerme esas mentiras, y por no haber sido capaz de decirte que no en ese momento. No te deseo lo peor, el karma te hará pagar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.