sábado, 10 de marzo de 2012

"Eres una especie de vicio que no puedo dejar".

Después de cinco meses, todo ha cambiado. Tu sonrisa no es la misma que era, tus palabras ahora duelen. Y, no solamente por lo que dices, sino por cómo lo dices. La verdad, no se quién te habrá comio el coco para que digas esas mentiras, pero se que nada te hará cambiar de opinión. Nunca. Y qué si no te quiero decir adiós. Eres tú el que toma esa decisión.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.